“El periodismo como bien público: 30º aniversario
de la Declaración de Windhoek”
Nueva York, 3 de mayo de 2021
Los retos mundiales a los que nos hemos enfrentado durante la pandemia de COVID-19 ponen de relieve el papel crucial que desempeña la información fiable, verificada y universalmente accesible para salvar vidas y construir sociedades fuertes y resilientes.
Durante la pandemia y otras crisis, como la emergencia climática, los periodistas y trabajadores de los medios de comunicación nos ayudan a navegar por un mar de información sometido a rápidos cambios y que a menudo resulta abrumador, al tiempo que despejan peligrosas inexactitudes y falsedades.
En demasiados países, corren grandes riesgos personales, como nuevas restricciones, censura, abusos, acoso, detención e incluso peligro de muerte, simplemente por hacer su trabajo. Y la situación sigue empeorando.
El impacto económico de la pandemia ha golpeado duramente a muchos medios de comunicación, amenazando su propia supervivencia.
A medida que los presupuestos se reducen, también lo hace el acceso a información fiable y surgen rumores, falsedades y opiniones extremas o divisivas que llenan ese vacío.
Insto a todos los Gobiernos a que hagan todo lo que esté en su mano para apoyar unos medios de comunicación libres, independientes y diversos.
El periodismo libre e independiente es nuestro mayor aliado en la lucha contra la información errónea y la desinformación.
El Plan de Acción de las Naciones Unidas sobre la Seguridad de los Periodistas aspira a crear un entorno seguro para los trabajadores de los medios de comunicación de todo el mundo, porque la información es un bien público.
Hoy conmemoramos el 30º aniversario de la Declaración de Windhoek sobre la Promoción de una Prensa Africana Independiente y Pluralista. A pesar de los drásticos cambios que han experimentado los medios de comunicación en los últimos tres decenios, el llamamiento urgente que se hace en la Declaración en pro de la libertad de prensa y el libre acceso a la información sigue siendo tan pertinente como siempre.
Reflexionemos sobre ese mensaje y redoblemos nuestros esfuerzos para proteger la libertad de los medios de comunicación, de modo que la información siga siendo un bien público vital para todos.